lunes

Miedo...

Hay días en los que siento mucho miedo. Despierto e inmediatamente me siento tan sola y perdida en la inmesidad de mis pensamientos que tengo miedo. Miedo de perder mis amores, miedo de perder mis sentidos, miedo de perder mi libertad, miedo de perder mi comodidad, miedo de olvidarme y olvidar mis sueños.

A veces paso horas enteras tratando de descrifrar porque soy tan cobarte, luego me acuerdo de lo mucho que me he equivocado en la vida y de ese temor a un Dios infundado por generaciones familiares en mis subcosciente, y es así que justifico algunas de las situaciones que infundan en mi, este miedo tan terrible.

A esta hora precisamente, tuve que escribirlo. No puedo mencionarlo a nadie, porque estoy segura que nadie entendería, no puedo llorar, porque estoy trabajando y digo que estas ganas de llorar tan inmundas son simple sensibilidad femenina propia de un estado físico, imagino que me entienden. 

Lo que me preocupa es que esto no es de ahora, es desde que soy niña y con los años siento que se agudiza más, que seguramente es la razón más poderosa por la que he me vuelto más insegura y menos arriesgada. Tengo miedo de mi misma porque ni siquiera conozco mis alcances, no soy mala, pero he tenido pensamientos malos y eso no debería ser tan normal.

No iré al sicólogo por esto, creo que lo único que necesito es aprender a confiar en mi, a refigiarme en las cosas que me gustan y salvaguardarme a través de las personas que dicen amarme.